Un reporte del 22 de enero de Laia Farran Graves para Forbes indica que el 29 de diciembre del 2024, un par de gafas que habían pertenecido a John Lennon se vendió por 52,000 dólares en una subasta benéfica. El evento Gala One, una velada de caridad que apoyaba a tres organizaciones benéficas (Amend, OneDrop y Well/Beings), tuvo lugar en Eden Rock, Saint Barths. Fue un evento repleto de estrellas, con invitados como Leonardo DiCaprio, Mike Tyson y Wyclef Jean. Muchos artículos extraordinarios se subastaron esa noche con fines benéficos, y uno de esos tesoros fue un par de gafas redondas de metal que John Lennon había tenido alguna vez. Alexander Bitar, un coleccionista y comerciante especializado en recuerdos históricos de alta gama, donó el artículo a la gala, y fuentes del evento señalaron que el ganador de las extraordinarias gafas no fue otro que el actor Leonardo DiCaprio.
En opinión de Bitar, pocos objetos de la historia de la cultura pop son más significativos e icónicos que las gafas redondas de John Lennon. Los anteojos son sinónimo de Lennon, ya que las usó prácticamente todos los días desde 1966 hasta su muerte en 1980. El modelo de las gafas subastadas se llama 'Windsor', y al ser un par vintage, no hay un sello visible del fabricante en ellas.
John Lennon llegó a utilizar muchas gafas, pero las que le hicieron tan famoso, las redondas y doradas, eran un modelo diseñado por Oliver Goldsmith, que ahora es una empresa de tercera generación que celebrará su centenario el año que viene.
Hablando por Zoom con Oliver Goldsmith, cuyo abuelo fundó la empresa, expresó que las gafas de John Lennon eran un modelo de Oliver Goldsmith, pero que no le suministraban las monturas directamente. Cree que probablemente las compró en una óptica local de Liverpool. Oliver cuenta que la empresa no sabía que las gafas de John Lennon eran su diseño original hasta que leyeron una noticia en un periódico sobre unas gafas de Lennon que se habían vendido en una subasta, en la que se informaba de que llevaban la marca Oliver Goldsmith. El informe también mostraba que a las gafas les faltaba un tornillo. Se cree que John Lennon se deshizo de ellas cuando esto ocurrió, pero su chófer se las quedó, y así fue como acabaron en la subasta.
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