No soy de jugar a la lotería, ir a casinos o intentar juegos de azar. No me considero una persona afortunada. Pero la suerte me llegó a lo grande una vez.
En el verano de 1964, los Beatles llegaban a Estados Unidos. Yo era una gran admiradora y le pedí a mi tía en Boston que me comprara boletos para su concierto en Boston. Ella no pudo. Pero la estación de radio WJAB anunció un concurso. Bessey's Fruit Juice (una división de B&M Baked Beans) iba a regalar 40 boletos de ida y vuelta con todos los gastos pagados a Nueva York para ver a los Beatles en concierto. Todo lo que tenía que hacer para participar en el sorteo era enviar tantas etiquetas de jugo como quisiera con mi nombre y dirección en ellas.
Esta era mi última oportunidad de ver a los Beatles.
Le rogué a mi madre que comprara más jugo para poder enviar más etiquetas. Ella no se dio por vencida, así que envié solo ocho etiquetas.
Sin esperar ganar, más tarde recibí una carta de Bessey. Suponiendo que era una carta de rechazo cortés, la abrí y vi que la primera línea decía: “!Felicitaciones! Eres uno de los 40 ganadores”. Tengo esa carta en un álbum de recortes. Estaba tan emocionada que me reí y lloré.
Debido a mi edad, tenía que tener un acompañante. ¿Quién mejor que mi madre?
El viernes 28 de agosto tomamos un bus Greyhound hasta la estación sur de Boston, donde, junto con los otros ganadores de Maine, tomamos un tren a Nueva York.
Cuando llegamos a Nueva York, fuimos al Hotel Commodore, que se pagó como parte del viaje, junto con las comidas y, por supuesto, las entradas para el concierto de los Beatles en el Estadio Forest Hills.
Esa noche fue el concierto. No pude escucharlos con todos los gritos de las chicas y la mala amplificación, pero lo esencial era tener la experiencia que siempre he recordado.
El concierto fue breve; el setlist solo se componía de 12 canciones. Después de su última canción, los Beatles abandonaron el estadio en helicóptero.
Al día siguiente era el viaje a casa. Pero mi estatus de celebridad continuó después del viaje. Los cuatro ganadores de Maine teníamos nuestras fotos en los periódicos locales, y el DJ de WJAB, Bob Fuller, me entrevistó al aire en la estación de radio. Cuando regresé a la escuela en el otoño en South Portland Junior High, fuí temporalmente famosa.
Todavía me pregunto por qué, cuando las posibilidades de ser elegida para el concurso eran tan escasas, yo sería una de los afortunadas personas seleccionadas.
Supongo que esa vez me tocó a mí ser una ganadora.
(Publicado el 23 de mayo del 2023 en Portland Press Herald)
[Traducido y editado por Mundo Beatle para TodoBeatles.com y EGB Radio]
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