"IMAGINE" A LOS 50: OPORTUNA ENTONCES, AHORA Y SIEMPRE

Por: Ed Zared

Fue a la vez una súplica y una orden. Cuando "Imagine" aterrizó en las listas de música pop hace 50 años en 1971, era nuevo pero reconocible, familiar pero único. Engañosamente simple y casualmente abstracto, su mensaje antimaterialista ofrecido libremente por un hombre muy rico. “Imagine” nació en el estudio con The Beatles, alcanzó la mayoría de edad como un disco en solitario de John Lennon y maduró en la composición de Lennon/Ono. Al enseñar la canción a su amigo y teclista Nicky Hopkins, John simplemente la llamó "la que más me gusta". Es un estudio en dicotomía.

“Imagine” rápidamente adquirió vida propia, distinguiéndose por su singular habilidad para evocar una visión pura de paz. A medida que crecía en fama y estatura, la canción sería más invocada que cualquier otra para calmar, consolar e inspirar; consuelo en tiempos de crisis, celebración en tiempos de alegría y conmemoración de acontecimientos importantes. “Imagine” sigue creciendo en estatura.

Fue el producto de la experiencia de John Lennon hasta ese momento. La expresión musical fue la suma de la experiencia de Lennon como compositor, perfeccionada durante muchos años en casa, en el estudio y en el escenario. Su simple melodía repetida es similar a "Strawberry Fields Forever" y "Lucy in the Sky with Diamonds". Su sincero llanto recuerda a "Don’t Let Me Down".

Pero la expresión lírica marcó un nuevo modo de abstracción para el nativo de Liverpool de treinta y un años.

John Lennon siempre había sido una "persona de palabras". Apreciaba el lenguaje sin sentido de Lewis Carroll, disfrutaba de los dobles sentidos y convertía el significado en sugerencias lascivas. Hizo poemas de malapropismos y se deleitó con el surrealismo psicodélico. Pero "Imagine" fue único, incluso para él.

En declaraciones a la BBC el 6 de diciembre de 1980, John Lennon confesó: “En realidad, eso debería acreditarse como una canción de Lennon/Ono. Porque mucho de eso, la letra y el concepto, vinieron de Yoko. Pero [en] esos días yo era un poco más egoísta, un poco más machista y de alguna manera omití mencionar su contribución. Pero estaba sacada de Grapefruit, su libro. Hay un montón de piezas sobre ' "Imagina" esto e "Imagina eso ... "  y [démosle] crédito ahora, después de mucho tiempo"

John y Yoko produjeron muchas creaciones; eventos de artes escénicas, libros, fotografías, cortometrajes, álbumes llenos de canciones. Pero John y Yoko solo dieron a luz dos obras maestras. Uno es su hijo, el brillante multiinstrumentista, compositor, intérprete, Sean Ono Lennon. Su otra obra maestra es "Imagine". La clave para entender a ambos descendientes es Yoko Ono.

Víctima en su infancia de los bombardeos aéreos de la Segunda Guerra Mundial, Yoko Ono se retiró a su propia imaginación. Una vez allí reinó sobre un mundo conceptual de su propio diseño. El mundo de Ono definitivamente no era una fantasía idealizada como la de Walt Disney. Su mundo era teórico, abstracto e intangible. Como artista de unos 20 años, Yoko Ono desafiaría la realidad misma, exponiendo sus hipocrecias, y derribandolas - o gritandolas. Este lado oscuro, más confrontacional de la obra de Ono, es el que molesta a algunas personas, y está destinado a hacerlo.

Pero Yoko y su trabajo tienen un lado más ligero, más ilusorio, positivo y constructivo. Este paisaje cerebral es donde los dos se conocieron y John Lennon se enamoró. El anhelo de Ono por un mundo mejor tenía sus raíces en el dolor y florecía en la esperanza. John Lennon podía comprenderlo. El encontró la combinación irresistible.

La pareja fue ampliamente criticada por la prensa. Algo acerca que uno de los hijos favoritos de Gran Bretaña se divorció de su verdadera esposa inglesa no le sentó bien. El hecho de que se casara con una japonesa, poco después de la guerra de Inglaterra con Japón, empeoró la desaprobación. El racismo, el prejuicio y el nacionalismo jugaron un papel en su condena. La pareja no lo olvidaría pronto.

“Imagine” es una denuncia firme del nacionalismo, la religión y el capitalismo, y por extensión del prejuicio y el racismo. John y Yoko consideraban todo esto como fuerzas de división, enemistad y odio; los ingredientes necesarios para la guerra.

Como sus progenitores, "Imagine" no es ajeno a la controversia. Hay muchos que no comparten la cosmovisión idealizada de John & Yoko. “Imagine”, aunque muy querido, también ha sido vilipendiado, al igual que sus padres. Una vez la letra ha sido comparada con el Manifiesto Comunista por el mismo Lennon. Y los fanáticos que aman a Dios y a la Patria se ofenden rápidamente con cualquier cosmovisión sin ellos. El niño es una viruta del viejo bloque.

Esta conmemoración del 50 aniversario de "Imagine" es una ocasión agridulce. Es un triste y terrible recordatorio de que la canción ha sobrevivido a John Lennon por una década.

Lennon claramente tenía la intención de compartir los créditos de composición con su esposa y pareja, pero no viviría lo suficiente para hacerlo. No fue hasta casi cincuenta años después que Yoko Ono finalmente hizo el cambio ella misma. En el 2017, la Asociación Nacional de Editores de Música nombró a "Imagine" como 'Canción del siglo'. Simultáneamente marcaron la ocasión atribuyéndo el tema a "Lennon/Ono". Sean Lennon, en un comunicado de prensa, señaló que "puede que este ha sido el día más feliz de mi vida y el de mi madre"

"Imagine" sigue prosperando. Nos honra con su presencia y evoca la de sus padres. Se convoca a menudo para hacerlo. Como el himno nacional, se ha convertido en un elemento fijo en la banda sonora de nuestras vidas. Pero es más una invitación que una promesa. El suave idealismo de la canción evoca una realidad alternativa y arrulla a los oyentes en una solemne contemplación. De esta manera, “Imagine” es sublime, trascendente y casi espiritual.

Invocamos a “Imagine” en tiempos de necesidad, para marcar los momentos sagrados y evocarlos.

“Imagine” suena regularmente en los Juegos Olímpicos, recordando sucintamente a las naciones en competencia su espíritu de cooperación, multiculturalismo y unidad. Ha sido interpretado no solo por los países anfitriones con un reclamo sobre sus autores —Japón, el Reino Unido y los Estados Unidos— sino también por Italia y Corea del Sur. El mensaje de "Imagine" es tan universal que inspira un sentido de propiedad colectiva.

El poder singular de "Imagine" para unir e inspirar se utiliza en momentos de necesidad y desesperación. La interpretación de Neil Young a raíz del 11 de septiembre fue un llamado sumamente conmovedor a la paz en vísperas de la guerra. Desde entonces, “Imagine” se ha empleado para apoyar innumerables organizaciones benéficas y causas. No hay canción que pueda resolver los problemas del mundo. Pero en sus esfuerzos, "Imagine" es un héroe, una canción campeona.

Feliz 50 de "Imagine". Larga vida. Y larga vida a John y Yoko.

(Publicado el 9 de octubre del 2021 en Culture Sonar)

[Traducido y editado por Mundo Beatle para TodoBeatles.com, EGB Radio, BFC, Beatles & Solistas: Fans Perú, Club Todos Juntos Ahora y grupos Facebook Beatles amigos]