1 de julio de 1965 - Llegada a Madrid
"¡Saludos, amigos!", dijo Paul en un español impecable. John repitió lo mismo, con una mueca y un extraño apretón de manos.
"Conocí a Brian Epstein en abril de 1965 durante su siguiente visita a España, un país que amaba mucho. Para mi sorpresa, Epstein conocía la revista Fonorama, que empezó a publicarse en 1963. Tenía curiosidad por saber si los Beatles tocarían en España ese año, a lo que Epstein respondió: "No". Brian Epstein pensaba que si los Beatles vendían tan pocos discos en España, no eran muy populares allí. Según él, los Beatles vendieron solo unos 3,800 discos en España, mientras que en otros países sus discos se vendieron por cientos de miles o millones. A lo que le expliqué que, bajo el actual régimen franquista, solo hay unos dos mil propietarios de tocadiscos en el país, pero que les han dado un buen uso. Colocando altavoces en los escaparates, los dueños de los tocadiscos ponían discos y organizaban fiestas callejeras. De esta manera, pude convencer a Epstein de que cada disco vendido en España encontraba adeptos gracias a la gran audiencia que se daba en estas fiestas. En resumen, Epstein cedió y los Beatles añadieron España a su gira europea"
[José Luis Álvarez, editor de la revista musical española Fonorama]
1 de julio de 1965 - Rueda de prensa en Madrid
La mayoría de las preguntas fueron traducidas por una mujer, y en su mayoría eran triviales: sobre su pelo largo, sus millones, sobre si les gustaba España y cosas por el estilo.
"Los acompañantes, entre ellos varios periodistas extranjeros, se dirigieron al Hotel Phoenix, situado en el Paseo de la Castellana, Plaza de Colón, Madrid, donde los Beatles se alojaron en las habitaciones 122, 123 y 124, tres de las cuales tenían acceso a una sala común con dos balcones con vistas al jardín y a la calle"
"Dos horas les bastaron para descansar y recuperarse. Entonces comenzó la caótica rueda de prensa. Los cuatro se sentaron en un sofá a rayas, y más de cien periodistas los atacaron desde todos los lados. Se les indicó a los periodistas que debían comportarse con calma y también se les recordó que solo tenían unos minutos para tomar fotos"
"Durante la breve sesión de fotos, Ringo y Paul no cambiaron de pose, mientras que John y George terminaron sentados en el respaldo del sofá y Paul posó con un clavel en la boca, que permaneció allí durante toda la rueda de prensa"
[Juan Agueras, Representante del Club de Fans de los Beatles]
(Publicado originalmente en el website beatles-chronology.ru)
LA VISITA DE THE BEATLES QUE HACE 60 AÑOS EMPEZÓ 'LA TRANSICIÓN PSICOLÓGICA' EN ESPAÑA
Por: Javier Herrero
La primera y única visita de The Beatles a España hace 60 años se resolvió como un “fracaso” según la prensa de la época, bajo un régimen que se empeñó en amortiguar su posible impacto, aunque no faltan voces para quienes aquel hito histórico inició La Transición de miles de jóvenes “a nivel psicológico”
“Fue un concierto para la anécdota pero que el tiempo ha reivindicado”, apuntaba al respecto Miguel Ríos, uno de los más ilustres asistentes al primero de los dos conciertos que 'The Fab Four' ofrecieron en el país, el de la plaza de toros de Las Ventas de Madrid un 2 de julio de 1965, al que siguió otro al día siguiente en la Monumental de Barcelona.
Así consta en el documental 'Que vienen los Beatles', con material de la visita filmado por los directores Pedro Costa y Francisco Beltriú como parte de un encargo del NO-DO, el informativo que se proyectaba en las salas de cine antes de las películas. Las imágenes al final terminaron siendo prohibidas y se mantuvieron inéditas hasta su exhibición por RTVE 30 años después.
“Hubo un contubernio para evitar que España tuviera una reacción similar a la de otros países (...). Había que frenarlo y periodistas se dedicaron a poner en duda la calidad y oportunidad de los Beatles, hasta su peinado, eran como unos pequeños gamberros que no tenían nada interesante”, declaraba allí el periodista Carlos Tena, una premisa que defiende este reportaje disponible en RTVE Play.
En aquel 1965 se estaba haciendo visible la mejora de la situación económica de España, en parte por el fenómeno del turismo, en parte por la entrada de dinero gracias a los trabajadores que emigraron.
En paralelo, comenzaba a desarrollarse una fuerte conciencia política, sobre todo en el ámbito universitario, con concentraciones cada vez más numerosas, una de ellas solo cuatro meses antes, y aquellos jóvenes deseosos de cambios encontraron en The Beatles un refugio de optimismo y liberación no solo musical.
Conseguir que visitaran España ya fue contra todo pronóstico, pues no estaba contemplado en su gira por el sur de Europa. Mientras en países como EE.UU. o Reino Unido sus grabaciones superaban el millón de copias, aquí no pasaba de las 4.000 (en gran medida por el exiguo número de tocadiscos en el país).
José Luis Álvarez, de la revista Fonorama, se encargó de convencer a su famoso representante, Brian Epstein, de que si recalaban aquí tendrían un gran éxito. Por otro lado, se comenta que si el régimen franquista accedió a la visita de aquellos 'melenudos' que hacían saltar los principios que había predicado durante más de un cuarto de siglo fue porque la reina Isabel II acababa de condecorarlos.
Con todo, se puso mucho énfasis en mostrar que España no sucumbía a ellos como otros lugares, por ejemplo a su llegada al aeropuerto de Barajas la policía les llevó por un recorrido alternativo evitando a los seguidores desolados que en muchos casos habían tenido que caminar hasta allí.
Según relató a EFE, Álvarez tenía contactados 50 autobuses para llevar a fans, pero desde Gobernación le pidieron que no lo hiciera pues “temían un atentado de un movimiento aparentemente anarquista que quería vincular lo de los Beatles con una cosa política”.
A la rueda de prensa organizada después en su hotel en Madrid, el Fénix, solo pudieron asistir periodistas con el carné que facilitaba el régimen, “unos 20 fotógrafos y unos 20 redactores” que realizaron preguntas en tono agresivo o burlesco, del tipo “¿Por qué lleváis esos pelos?”.
Sí se aprovechó el momento para hacer una contrapromoción del vino de jerez, frente al 'sherry', tal como se había popularizado en Reino Unido. Durante el acto, cada uno de los Beatles firmó una bota, pero a su término quedaron arrumbadas y perdidas en un almacén. Ya en los 80 se encontraron dos, las de McCartney y Starr.
A la hora del concierto la tensión era máxima en el entorno de la plaza, en una España en la que los jóvenes y la gente en general encontraba muchas dificultades para reunirse, aún más para saltar y divertirse en multitud.
El grupo tocó doce canciones ante muchas localidades vacías y un sonido raquítico para lo que se estilaba entonces. El precio de la entrada no ayudaba. Costaba 75 pesetas la más barata, cuando el salario mínimo era de 60, y eso hizo que hubiese más gente fuera que dentro de la plaza, como recordaría el propio McCartney años después: “Los fans reales estaban fuera, los de dentro era gente rica, así que no lo disfrutamos mucho”.
El franquismo, que resumió la presencia de los Beatles en el noticiero semanal en dos minutos, ya tenía su relato armado, aunque lo cierto es que en Barcelona, donde los controles eran más laxos, la plaza sí se llenó con 18,000 personas, pero no fueron las imágenes que se difundieron.
(Publicado en El Diario.es el 1 de julio del 2025)
60 AÑOS DE LOS BEATLES EN ESPAÑA: !QUÉ DOS NOCHES LAS DE AQUEL AÑO!
Por: Ulises Fuente
Por: Ulises Fuente
La expectación era máxima, aunque, en realidad, pocos españoles sabían de quiénes se trataba. Los rumores se habían extendido como la pólvora por Madrid y Barcelona. La prensa había calentado el ambiente y en las calles se repetía un vocablo con insistencia: llegaban los "melenudos", término que invocaba una presencia incomprensible, casi amenazante. A las 17:40 horas del 1 de julio de 1965, el cuarteto más famoso de todos los tiempos hacía su entrada triunfal en nuestro país. Los cuatro de Liverpool llegaron en un avión de Iberia al Aeropuerto de Barajas e hicieron visitas turísticas, pero las noticias no tenían la inmediatez de hoy.
El NO-DO recogió los hechos diez días después: la llegada del conjunto musical a Madrid, según la crónica oficial, "no es apoteósica", a pesar de que en el aeropuerto se concentra
"una juventud curiosa y alegre". El informativo cinematográfico recoge la rueda de prensa de los británicos en Madrid, grabada por gran número de objetivos, que, como remarca la voz del noticiero, "apuntan principalmente sobre los tocados capilares", confirmando la obsesión casi freudiana con la longitud de su cabello.
El 2 de julio y tras hospedarse en el Hotel Meliá Fénix, Los Beatles actuaron en nuestro país por primera vez. La llegada de las superestrellas (ellos ya habían desatado la locura en Estados Unidos el año precedente) era una oportunidad y un riesgo para la España del momento.
"Podían demostrar que aquí también se hacían conciertos como en cualquier lugar del mundo, pero no podían permitir que nada saliese mal", recuerda Ignacio Martín, bajista de Los Pekenikes, que telonearon a los "fab four" esa noche.
Seis décadas después, un doble concierto en Madrid y Barcelona rinde tributo al repertorio de aquellos genios: será el 2 de julio en el Teatro Capitol de la Gran Vía de Madrid y el 3 de julio en el Teatre Apolo de Barcelona con la banda tributo The Bootleg Beatles.
(Publicado en MSN el 1 de julio del 2025)
Los Conciertos de los Beatles en España (Audio)
No se promocionaron, se les llamó melenudos, degenerados, hubo más policía que público, las entradas eran carísimas. Ana Uslé nos hace viajar casi 60 años atrás, 1 de Julio de 1965, cuando los Beatles pisaron España para dar dos conciertos, uno en Madrid y otro en Barcelona. En una estancia histórica que tal sólo duró 70 horas. Nos ayuda a saber más sobre estos conciertos Magí Crussels, profesor de Historia contemporánea de la Universidad de Barcelona, especialista en cultura popular y en los Beatles.
(Publicado en Cadena Ser el 25 de junio del 2025)
Especial 'Los Conciertos de los Beatles en España'